El que nace pa' tamal
Me preguntaban hace días si creo en el destino y respondí que no.
Nunca he sido una persona que crea que todo está escrito. Me molestaría saber que mi vida y su curioso curso no depende de mí, y que, por más intentos que haga, nunca la podré cambiar.
Me desagrada pensar que mis errores, pasados o futuros, ya alguien los había determinado.
Menos me gustaría pensar que mi muerte ya está programada. Que por más que lo intente, nunca podré durar ni un minuto más, o menos.
Entonces me pregunto: ¿Es el destino que miles de personas en África mueren gracias al SIDA y la hambruna? ¿Desde que nacieron ya alguien sabía cuando iban a morir?
Una fuerza superior (Dios tal vez) juega a los soldaditos, según quien piensa esto. ¿Habrá un libro de visitas en el cielo o el infierno en donde ya está marcado tu próximo check in pero no tu check out?
No lo se. Igual y Calderón ganó por el destino, no por su habilidad política. Todo esto quiere decir que todo lo que hagamos no sirve para nada, si somos habilidosos o no, no importa, todo lo que pasa es por culpa del destino, no de la causalidad (no casualidad).
Como dirían las abuelitas: El que nace pa' tamal...del cielo le caen las hojas.
Nunca he sido una persona que crea que todo está escrito. Me molestaría saber que mi vida y su curioso curso no depende de mí, y que, por más intentos que haga, nunca la podré cambiar.
Me desagrada pensar que mis errores, pasados o futuros, ya alguien los había determinado.
Menos me gustaría pensar que mi muerte ya está programada. Que por más que lo intente, nunca podré durar ni un minuto más, o menos.
Entonces me pregunto: ¿Es el destino que miles de personas en África mueren gracias al SIDA y la hambruna? ¿Desde que nacieron ya alguien sabía cuando iban a morir?
Una fuerza superior (Dios tal vez) juega a los soldaditos, según quien piensa esto. ¿Habrá un libro de visitas en el cielo o el infierno en donde ya está marcado tu próximo check in pero no tu check out?
No lo se. Igual y Calderón ganó por el destino, no por su habilidad política. Todo esto quiere decir que todo lo que hagamos no sirve para nada, si somos habilidosos o no, no importa, todo lo que pasa es por culpa del destino, no de la causalidad (no casualidad).
Como dirían las abuelitas: El que nace pa' tamal...del cielo le caen las hojas.
Comentarios